Después de años de negociación, el nuevo Reglamento que vela por la protección de los datos personales en Europa ya ha entrado en vigor. Los estados miembros tienen ahora dos años para armonizar sus normas a la nueva legislación comunitaria.
En un post anterior os comentamos las principales consecuencias y obligaciones que suponía para empresas, ciudadanos, organizaciones, administraciones… esta nueva normativa, que aporta un mayor control de los datos personales a los ciudadanos.
Desde la Agencia Española de Protección de Datos celebran la entrada en vigor de esta normativa que permitirá un mayor control de la privacidad a cada ciudadano. En palabras de Rafael García Gozalo, responsable del área internacional de la AEPD, este Reglamento mejorará “sustancialmente” la privacidad de los ciudadanos.
En una entrevista a la agencia de noticias EFE, Rafael García ha destacado la necesidad de esta reforma de la normativa de protección de datos, que con la entrada de nuevas tecnologías y el auge del mercado digital había quedado obsoleta.
Los ciudadanos, como comentamos tendrán un mayor control sobre sus datos personales, las empresas y los responsables de su tratamiento deben explicar claramente el uso qué hacen de ellos y el ciudadano debe conocer sus derechos para poder actuar en consecuencia, en caso de que se vulnere la Ley.
En cuanto a la privacidad, la obligación de que los servicios webs, aplicaciones, perfiles sociales deben garantizar un grado de privacidad a sus usuarios desde el inicio, lo que se conoce como privacidad desde el diseño, supone un paso hacia delante en la protección de datos. “Es de esperar que la puesta en marcha de forma conjunta de todas las medidas contribuya de forma sustancial a mejorar el nivel de protección personal de los ciudadanos”, responde en la entrevista.
Rafael García también ha destacado el hecho de que los ciudadanos cada vez están más preocupados por la seguridad de sus datos personales, pero a la vez son más propensos a compartir mucha información en sus redes, blogs, foros.
Hablando de las empresas, su opinión es que sobrevivirán aquellas que cumplan con la normativa de protección de datos, considera que es una ventaja competitiva. “Es una realidad que las compañías con mala trayectoria en protección de los datos suelen ser penalizadas por el mercado, empezando por los clientes”.