La Agencia Española de Protección de Datos obliga a la empresa Worldcoin a suspender su captación de datos debido al alto riesgo que suponía la recopilación de datos biométricos (escaneos de iris), unos datos calificados por la ley como altamente sensibles por el peligro que conlleva su mal uso.
¿Existen riesgos para nuestra privacidad al ceder nuestros iris a cambio de dinero?
Pese a lo chocante que resulte este titular estas semanas distintos centros comerciales de España han estado “regalando” criptomonedas a cambio de escaneo de los ojos, lo que incluso está atrayendo a numerosos menores de edad. En la era actual, donde la tecnología avanza a pasos agigantados, surgen proyectos como los recién mencionados que desafían los límites convencionales y plantean preguntas fundamentales sobre la privacidad, la seguridad y la equidad en el acceso a los recursos financieros. Uno de los proyectos más innovadores y a la vez controvertidos en este sentido es el de Worldcoin, impulsado por Sam Altman, el cerebro detrás de OpenAI y creador de ChatGPT. Este proyecto promete no solo revolucionar el concepto de criptomoneda, sino también la manera en que entendemos la identidad y la economía global. Pero ¿es realmente beneficioso ceder nuestros datos biométricos, específicamente el iris, a cambio de dinero?
¿Qué es la moneda Worldcoin y cuál es la finalidad de su plan?
Worldcoin se presenta como una moneda digital revolucionaria que busca proporcionar un ingreso básico universal a las personas, simplemente por ser únicas. A diferencia de otras criptomonedas como Bitcoin o Ethereum, Worldcoin no requiere una inversión inicial de dinero para obtener sus tokens, denominados WLD. En su lugar, el proyecto propone un modelo en el que, a cambio de escanear el iris de los usuarios, se les otorga una cantidad de tokens, promoviendo así un acceso más equitativo a la economía mundial. Los cofundadores, Sam Altman y Alex Blania, ven en esta iniciativa una manera de garantizar una autenticación humana precisa, diferenciando claramente a las personas de los bots en el mundo digital.
¿Cómo funciona y qué implica el escaneo del iris?
El corazón del proyecto Worldcoin es su método de autenticación: el escaneo del iris. Mediante un dispositivo especializado llamado orb, los usuarios pueden registrar sus iris, garantizando así que cada persona tenga una identificación única a nivel mundial. Este proceso no solo busca contrarrestar el uso de múltiples identidades falsas en el ámbito de las criptomonedas, sino también proporcionar a cada usuario un «pasaporte digital» universal. Aunque la empresa asegura que los datos biométricos se manejan con la mayor seguridad, eliminando las imágenes del iris rápidamente después de su recopilación, las dudas sobre la privacidad y seguridad de esta información son un tema de debate constante.
El debate sobre la privacidad y la ética
La recolección de datos biométricos por parte de Worldcoin ha generado un intenso debate sobre la ética y la privacidad. Críticos del proyecto, han expresado su preocupación por las implicaciones de catalogar información biométrica tan sensible. Aunque Worldcoin asegura que tomará medidas para anonimizar y proteger estos datos, la falta de un marco claro y la existencia de prácticas de marketing engañosas en etapas tempranas del proyecto han sembrado dudas sobre la integridad y seguridad de la iniciativa. Sim embargo desde Legitec recordamos que la información de reconocimiento del iris es un dato personal especialmente sensible y su mal uso puede provocar numerosos perjuicios. El escaneo del iris proporciona un dato biométrico que identifica a una persona de forma inequívoca y permite reconocerlo de entre todas las demás.
¿Se ha manifestado la Autoridad de Control?
Ayer mismo leíamos la noticia sobre que la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) ha obligado a la empresa Worldcoin a interrumpir su actividad en España y le ha prohibido seguir escaneando el iris de miles de personas y recopilando datos personales mediante esta mecánica tan intrusiva. Desde el pasado 20 de febrero han confirmado que investigaba la AEPD cuatro denuncias sobre esta actividad y finalmente ha decidido de forma cautelar prohibir a la empresa continuar con esta práctica.
Esta medida cautelar ha sido tomada de manera rápida amparándose en circunstancias excepcionales como es este tratamiento de datos personales, con el fin de prevenir su posible cesión a terceros y salvaguardar del derecho fundamental a la protección de datos personales.
Desde Legitec insistimos en que el escaneo del iris implica la recopilación de datos biométricos altamente sensibles ya que una vez que los datos oculares se recopilan, existe la posibilidad de que sean utilizados para fines no autorizados o sin el consentimiento adecuado del individuo. Esto podría incluir el seguimiento de la ubicación, la identificación sin consentimiento o incluso el uso en actividades delictivas como el fraude. Es crucial que los usuarios sean conscientes de estos peligros y no se predispongan tan fácilmente a este tipo de tratamiento para mitigar estos riesgos y garantizar su seguridad en un mundo tan tecnológico como es el nuestro.
